Una reversión es cualquier movimiento sustancial del precio que se produce en contra de la tendencia predominante. Por supuesto, esto hace que cualquier inversión dependa en gran medida del ojo del espectador. Sin ningún requisito estricto absoluto o proporcional para que un movimiento de precios se define como una reversión. Pero el principio general de un movimiento significativo en contra de una tendencia existente reconocida se mantiene.
Otros términos habituales para referirse a los retrocesos son «corrección» y «reducción de ganancias» (o pérdidas).
Anatomía de una reversión
Se produce cuando se produce un rechazo brusco de una fuerte tendencia existente. La mayoría de las veces, las reversiones son producto de una corrección de la información o de la perspectiva que impulsó la tendencia inicial o de un periodo de recogida de beneficios, consolidación o compra, en el que el brusco cambio de precio de la tendencia ha provocado una cantidad considerable de operaciones en respuesta.
Operar con una reversión

Casi todas las tendencias, por muy fuertes que sean, tendrán inevitablemente períodos de retroceso. Éstas pueden ser grandes oportunidades para obtener pequeños beneficios o para posicionar las operaciones para obtener mayores beneficios de la tendencia continuada.
Por ejemplo, una fuerte subida de precios en una acción de 100 a 110 dólares basada en noticias positivas puede ver un rápido retroceso a 105 dólares como resultado de que los operadores iniciales tomen ganancias rápidas y sigan adelante. Sin embargo, es probable que los siguientes operadores continúen comprando la acción durante un periodo más largo a lo largo del día basándose en las noticias positivas. Por lo que es probable que el precio vuelva a subir hasta los 110 dólares y más allá.
Este retroceso presenta a los operadores una variedad de oportunidades, desde ponerse en corto en la fuerte subida inicial del precio hasta los 105 dólares, tomar un beneficio rápido mientras el precio continúa su tendencia alcista después del retroceso o utilizar la parte inferior del retroceso como posición inicial para una operación de mantenimiento a largo plazo.
Reflexiones finales
Los retrocesos son una característica extremadamente común en el paisaje de los mercados, y ser capaz de reconocerlos y operar con ellos debería ser un componente esencial de la caja de herramientas de todo operador.